(Sobre el ‘en-D10S-amiento’ del 'Diez')
Quiero empezar comentando que me gusta MUCHO el fútbol; soy un hincha del ‘buen fútbol’, he disfrutado mucho de jugarlo tanto como disfruto de mirar un buen partido; y para mí, Maradona fue –junto a Messi– de lo más mágico y extraordinario que vi (futbolísticamente hablando).
Amo ver sus jugadas, sus goles, sus gambetas, sus acrobacias (con cualquier tipo de pelota)... Me emociono también viendo programas donde narran su historia de vida, con sus humildes inicios, y las miles de anécdotas conmovedoras dentro y fuera de la cancha...
Lo admiraba (y lo seguiré admirando) como jugador... Como psicólogo, he visto documentales de él, reflexionando sobre situaciones de su vida, y entiendo que –en un punto– fue un pobre pibe (y luego un pobre tipo) subido por mucha gente a un pedestal tan alto, pero TAN ALTO, del que luego no pudo (o no supo) bajar ni volver a tocar el suelo con los pies, ni vivir en la misma realidad que el resto…
Ningún hombre convertido en “dios” puede volver a tener una “vida normal”.
La 'Persona' se convirtió en 'Personaje'
Lo subieron tan alto, que tocó el cielo con las manos...
Un "hombre-dios", que TODO lo tiene permitido, que TODO lo puede realizar y concretar, al que TODO se le perdona... Lo quiere y lo compra; lo pide y lo tiene...
Pero quedó allí, varado en ese pedestal que lo aleja y excluye del resto de los mortales... en ese pedestal no hay límites, no hay un “hasta acá”, no hay "pares"... es un lugar de omnipotencia, pero también de mucha soledad, de un vacío muy grande que enloquece y enferma: no hay amigos, sólo aduladores, súbditos, admiradores, lamebotas, alcahuetes, interesados/as, aprovechadores, traidores...
Se cargó al hombro a una familia con sólo 15 añitos, jugando para Argentinos Juniors (compró una casa para sus padres)… a los 17 se puso al hombro todo un equipo de fútbol, a los 21 se puso al hombro todo un club (Boca Jrs.), a los 24 tenía a sus pies (literalmente) a toda una ciudad (Nápoles), a los 25 lideró toda una selección, y con sólo 26 años tuvo la gloria y el clamor de todo un país –y de gran parte del mundo deportivo– (al ganar el Mundial de México '86)… Demasiado para un jovencito.
Esto NO significa –en absoluto– que todas las personas muy famosas terminen con un trastorno de personalidad; para nada! (De hecho Messi, en su forma de ser, de pensar, y de actuar –en lo que hace a la vida pública y privada fuera de los partidos y entrenamientos–, es la antítesis de Maradona). Siempre hay un interjuego variable y complejo entre los factores ambientales (el entorno familiar y social) y los factores personales (singulares, particulares de cada persona).
¿‘La parte’ por ‘el TODO’, o ‘el Todo’ por ‘la parte’?
PERO, hay cosas que –al menos yo– no puedo pasar por alto, ni soslayar, ni menospreciar...
La mayoría de la gente, suele tomar ‘la parte’ (deportista estrella y exitoso) por ‘el TODO’... Que haya sido un futbolista ‘genial’, no quita ‘las otras partes’ de lo que era (un machirulo, prostituyente, esposo mentiroso e infiel, abusador, progenitor abandónico, maltratador, violento, etc.).
Hay cosas que –para mí– no pueden tolerarse ni justificarse, y tampoco podemos hacer como si no hubieran pasado:
a) Fue Prostituyente; b) Abusador de menores; c) Abandonó –y desconoció– hijxs que tuvo con otras mujeres.
Hay fotos donde se lo ve a Maradona con 2 adolescentes (ellas desnudas, él en calzoncillos), menores de edad. Esto da cuenta de los puntos a) y b).
Digo "Prostituyente", porque 'el acto de prostituir' lo realiza el varón al pagar (y no la mujer, aunque se pare en una esquina)… Los hombres pagan, justamente, para abusar sexualmente, comprando el consentimiento de la otra persona (la cual NO tiene DESEO de mantener una relación sexual con aquel… el que haya –o no– Deseo, cuando se trate de una mujer adulta, es lo único que debería preocuparnos: por ello se dice que los prostituyentes son Violadores con billete$).
Por si hay quien no lo sepa, aclaro el punto b): cuando un adulto se involucra sexualmente con una niña/niñe o adolescente menor de edad (del modo que sea: forzado, engañado, incentivado, etc.), no importa si la menor consintió o no, ni importa si el adulto le pagó algo o no; ES Abuso igual.
Si se hiciesen públicas las fotos de otro hombre adulto reconocido (que despierte menos simpatía que Maradona –o directamente antipatía) con 2 adolescentes desnudas, lo más probable sería que la reacción de repudio popular empujaría una investigación, un juicio y seguramente una sanción… Pero cuando se trata de un hombre millonario y poderoso, como Maradona (y como tantos otros hombres poderosos y famosos), no pasa absolutamente nada.
Pero bueno, estamos en un país (y en un mundo) donde un (ahora ex) funcionario protagoniza una escena sexual en VIVO durante una sesión parlamentaria; y no pasa nada!… apenas le hacen un ‘acting’ de repudio, mientras hoy el tipo sigue lo más tranquilo.
Lo peor, es que además de haber tenido un cargo en el Estado, tiene denuncias previas por acoso y violencia… que NADIE jamás lo investigó.
Hacen lo que hacen PORQUE PUEDEN, porque tienen el aval de una sociedad machista con instituciones que los protegen, y un sentido común construido desde un patriarcado milenario. ESA es la IMPUNIDAD que otorga el patriarcado, ese es el "privilegio": el poder hacer algo aberrante, sin que haya mayores consecuencias para quienes forman parte de ese grupo y los perpetran (en este caso: "los Machos").
La Negación…
–Bueno, 'la cagaba a la jermu', pero ¿y qué?… “el Diego” nos llevó a la final de un Mundial de Fútbol… dos veces!
–Y sí, tuvo hijos por todos lados y no se hizo cargo; pero bueno… Nos trajo la copa del mundo…!
–Ya sé, se c0g14 pendejas, pero bueno… hizo 2 goles contra los ingleses…!
–Sí, vi cuando le disparó a los periodistas con el rifle de aire comprimido, pero bueno… nos dio tantas alegrías… ¿vos viste lo que era dentro de la cancha?, era un mago!!
–Bueno, quizás fue violento y maltrató a muchas minas; pero… pobre tipo, no podía salir a la calle ni tener una vida normal…!
–Ta bien, andaba siempre de joda con ‘minas’ y en la ‘falopa’, pero bueno... se desvivía por venir a jugar y ganar con la selección!, fue el mejor jugador del mundo! –Ok, abusó sexualmente de adolescentes, pero bueno… era humilde, salió de un barrio re pobre, de Villa Fiorito; se hizo de abajo...
–Sí, abusó nenas de la edad de mi nieta, pero era transgresor... y también era buen tipo, buen amigo, era atento, generoso y solidario, ayudaba a la gente, contribuía en causas benéficas… –Además se enfrentó a los poderosos de la FIFA, defendía a los de abajo...
–Bueno, pero… ¿vos sabés lo que era estar en los zapatos de Maradona!??
(Basado en contestaciones reales y posibles)
Un abusador y/o prostituyente, puede ser –en cierto contexto– un ser encantador, amable, gracioso, cordial, divertido, solidario, buen amigo, confiable, cariñoso, comprometido, luchador, talentoso, famoso, admirado...
No creamos que un pedófilo, un abusador o un prostituyente es "un monstruo" a simple vista... Es "uno más"; "uno como cualquiera"...
Y eso es –para ELLAS– lo más peligroso y aterrador... porque el "príncipe azul" puede volverse "Mr. Hyde" en un abrir y cerrar de ojos.
No podemos negar, desconocer, justificar (ni dejar de condenar) a abusadores, pederastas, prostituyentes… –aunque sean ‘geniales’ en otros campos o ámbitos–.
Eso no quita que pudieran hacer cosas ‘positivas’ por otras personas o causas…
Podemos reconocer y admirar a una persona por su genialidad en el campo deportivo, artístico, etc., pero NO a costa de negar o desconocer sus delitos, sus faltas, sus violencias.
Dice mucho de nosotrxs –como personas y como sociedad– si ponemos esos temas en segundo plano (o bajo la alfombra), como si esas prácticas (delictivas y terriblemente dañinas para las niñas/os y adolescentes que lo padecieron) no tuvieran ‘tanta importancia’, como si no hubiesen pasado… como si fuese “una falta menor”, “una contradicción”, una “equivocación”… (“una mancha más al tigre”).
Pero NO fueron “contradicciones”, ni “equivocaciones”, ni “errores”… Esa es la conducta de un típico machista, pero acrecentada y agravada por su fama y poder.
Abusar adolescentes, menores de edad, es MUY grave (¿hace falta aclararlo? No interesa si pagó o no)… Sus contactos lo hacían inmune, su dinero y fama compraba impunidad para hacer lo que se le antojase, y había un cerco mediático que sólo difundía algunas de sus conductas privadas (pues una cuota de amarillismo siempre es buena para 'el circo' de los medios).
Así como a la mayoría de los abusadores y misóginos, a Maradona no se lo juzgó ni se le condenó por esos delitos.
La culpa y sospechas para las víctimas, las disculpas para el victimario
Ahora... Imaginemos si se trataba de una hija, hermana, prima o sobrina tuya: ¿podrías pasarlo por alto?, ¿te seguiría importando tan poco?, ¿lo podrías minimizar?, ¿podrías seguir pensando en el gol al seleccionado inglés en el '86?
¿Quién piensa en las víctimas de los abusos sexuales?
(Sean estos abusos realizados por "padres" –aunque mejor llamarle 'progenitor', pues quien comete ese delito ya no puede seguir considerándose "padre", lo mismo con curas pedófilos y violadores–, u otros varones –mayores de edad– del entorno familiar o social, como tíos, abuelos, hnos. o primos, vecinos, curas, maestros o profesores, etc.)
No se trata de "hacer leña" del "ídolo caído"...
Se trata de preguntarnos sobre nuestros Valores y prioridades, sobre la sociedad en que vivimos, de cuestionar a nuestros "ídolos", incluso a nuestros "dioses" (celestiales o terrenales)... Y de paso cuestionar nuestro afán idealizador, nuestro fanatismo (nuestra ceguera), nuestra complicidad con la "cultura del abuso y la violación"...
Obvio... Maradona es sólo un individuo, un "hijo sano del Patriarcado", uno más... En relación a las mujeres no fue muy diferente a otros hombres –sean o no ricos–. Maradona no tenía por qué ser una excepción, ni por qué ser “perfecto”… Él no era "EL problema", sino un síntoma, un analizador... Una muestra ‘a escala’ de cómo son vistas, consideradas y tratadas las mujeres (y niñas, niñes y adolescentes) en un mundo patriarcal.
Y, por otro lado, un espejo donde ver reflejado el culto a la personalidad, el endiosamiento, la idolatría, la idealización y el híper-fanatismo de esta sociedad (con todo el poco pensamiento crítico que ello implica).
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